Rákira Chicken, otra forma de hacer pollo a la brasa

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Rákira Chicken, otra forma de hacer pollo a la brasa

26 December 2018

COLOMBIA - Desde su sistema de cocción, a la brasa y sin hueso –salvo por los perniles y las alas–, el pollo de Rákira Chicken marca una diferencia con las casi uniformes ofertas de asado que están en la mente de los colombianos.

“Sin huesos, sin rabadilla, se pone al carbón la carne plana –explica Emiliano Moscoso, cabeza y fundador del Grupo Sierra Nevada, al que pertenece esta nueva marca–. Así, la carne se cocina mejor que en el modelo cóncavo. La cocción es más pareja, como un steak de pollo y, además, es más fácil de comer”.

El lugar, cuyo primer punto está ubicado en el barrio Rosales (zona G), en el segundo piso de un local que comparte con una sede de la hamburguesería Sierra Nevada, lo sirve sobre una cesta plana o palangana, a manera de picada, para que el comensal no olvide que su intención es explorar el gusto colombiano, reporta El Tiempo.

Moscoso indica que el sabor local se da a partir de la marinada de pollo en cerveza y algunos aliños. Y de este se puede pedir un cuarto, medio o entero en dos opciones: tradicional u orgánico, este último sujeto a disponibilidad.

La elección hace variar el precio. Así, medio pollo tradicional costará 13.500 pesos y si es orgánico, 22.500 pesos. Si se quiere entero, será de 27.900 o de 45.000 pesos, respectivamente.

La idea de Rákira Chicken es ofrecer ingredientes de calidad en una categoría que de por sí ya es popular, a precios que puedan competir. Así que una palangana que lleve, por ejemplo, un cuarto de pollo tradicional (7.900 pesos), papas fritas (4.000) y una bebida de 12 onzas (4.000) bordea los 16.000 pesos, una oferta competitiva.

La carta de Rákira Chicken no es extensa pero sí diferente de lo que se suele esperar de una pollería. A partir de la elección del pollo, la cesta se puede acompañar no solo de papas sino de una ensalada de lechugas y repollo que además lleva uchuva, tomate y zanahoria.

Y, aunque la bebida puede ser una gaseosa más, el lugar propone la limonada de panela orgánica (cuya compra apoya a una fundación para niños en Suba) o tres aguas frescas: la de feijoa con hierbabuena, la de mora con ralladura de limón y la de durazno con limonaria.

Entre las salsas que pueden acompañar el pedido están la de ajo, la BBQ con tamarindo, la de maní picante, el chimichurri y el infaltable ají. Aunque se diseñaron para acompañar el pollo, también acompañan bien las papas.

Y hay un interesante plato vegetariano de vegetales fritos, servido también en una cesta en la que trozos de coliflor, brócoli, pimentón rojo, zanahoria y unos garbanzos crocantes comparten el protagonismo.

Moscoso dice que ellos trabajan además “con pollos de crecimiento lento, de 60 días, que hacen ejercicio, se mueven, no se alimentan con antibiótico. Así que se puede elegir entre normal y orgánico”. Por ahora, tienen proveedores externos, pero, a largo plazo, el grupo apuesta por criar sus aves en tierras de Ráquira, Boyacá.

En esa búsqueda por exaltar el sabor colombiano hay postres conocidos con algún giro novedoso en el sabor. La oblea que todos conocemos puede pedirse, por ejemplo, con salsa de guayaba agria o de maracuyá. Y está la cuajada con melao caliente, cortada en cuadritos.

¿Dónde y cuándo?
Rákira Chicken. Calle 71 n.° 4-49, segundo piso, Bogotá.
Lunes a jueves, domingos y festivos, de 12 m. a 9 p. m.
Viernes y sábados, de 12 m. a 10 p. m.
Domicilios en el WhatsApp: 311 4785364.

Del equipo de redacción de ElSitioAvícola