En defensa de las empresas avícolas

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En defensa de las empresas avícolas

18 January 2012

OPINIÓN - En semanas recientes se han presentado acusaciones acerca de colusión en la industria avícola chilena. Admito que yo solo conozco lo que se ha publicado en la prensa. Desafortunadamente, los medios de comunicación no siempre presentan la información en forma imparcial, entonces es difícil saber qué es lo que realmente ocurrió.

La realidad es que esta no es la primera vez que una industria avícola latinoamericana ha sido demandada por “colusión” y ciertamente no será la última. Al producir alimentos que son básicos para los consumidores, pollo y huevo, cualquier alza en el precio de estos productos provoca una reacción negativa por parte del público.

A veces el Gobierno decide “investigar” estos casos, siempre suponiendo que existe algún esfuerzo común y malévolo dentro del sector avícola para aumentar y controlar los precios.

En el caso de Chile, el Gobierno dice que la comunicación entre las empresas líderes y la asociación de avicultores indica que había colusión.

En primer lugar, una de las tareas primordiales de cualquier asociación avícola es la de proveer información a sus miembros. Las asociaciones obtienen y diseminan las estadísticas esenciales acerca del sector. Esta información es importante para las empresas, que posiblemente se usa para la toma de decisiones a corto o largo plazo. Esto no implica colusión, ya que cada empresa hace lo suyo con los datos.

En mi experiencia, las empresas avícolas siempre saben lo que está haciendo la competencia: existen pocos secretos. Sea de precios, productos, producción o estrategias comerciales, todas las empresas saben lo que está haciendo la competencia. Y si no lo saben, entonces la empresa está fallando, de alguna forma.

Según la empresa, lo que se sabe acerca de la competencia puede o no afectar a sus decisiones estratégicas. Algunas empresas basan toda su estrategia en combatir con la competencia, mientras que otras empresas siguen su propia estrategia sin importar tanto lo que están haciendo otras empresas.

En cuanto al “control de precios” debido a la colusión por empresas avícolas, la verdad es que hay muchos factores que afectan a los precios de productos avícolas. Don Pollo, una de las empresas chilenas involucradas en el caso, sostuvo que la variación de precios se debió a los cambios de los costos de insumos y al precio en los mercados internacionales y no a la operación de un cartel.

Los precios de insumos, principalmente maíz y soya, han estado muy altos y volátiles desde 2008, y eso más que nada, ha precipitado las alzas en los precios de pollo y huevo. Precios más altos no gustan a los consumidores, pero las empresas tienen que de alguna manera recuperar sus costos de producción.

Estos últimos años han sido muy difíciles para las empresas avícolas y muchas experimentaron pérdidas en 2011, más que nada por los altos costos de insumos.

Para resumir, hay muchos factores que afectan al suministro y a los precios de pollo y huevo (solo he mencionado unos pocos). Cuando alguien inmediatamente acusa al sector avícola de algún tipo de colusión, me parece que no entienden bien el mercado agropecuario, que está muy internacionalizado, ni las realidades de operar una empresa rentable.