Avicultores niegan el uso de clembuterol

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Avicultores niegan el uso de clembuterol

13 June 2011

MÉXICO - Acusan al titular de la FMF, Decio de María, de afectar a la industria al señalar que los jugadores comieron pollo o carne contaminada con clembuterol; si quisieran incrementar el músculo de las aves tendrían que llevarlas al gimnasio, dicen.

La Unión Nacional de Avicultores (UNA) acusó al secretario general de la Federación Mexicana de Fútbol, Decio de María, de provocar afectaciones importantes a esa industria al señalar que los jugadores involucrados en el escándalo de dopaje "comieron pollo o carne que seguramente estaban contaminados de clembuterol".

Esto no puede ser posible porque nunca se ha suministrado esa sustancia a esas aves para promover su crecimiento, pues si se quisiera incrementar el músculo de los pollos tendrían que llevarlas al gimnasio, manifiestan desde UNA.

A través de un comunicado, la UNA, que preside Jaime Crivelli Espinoza subrayó: "El empleo de esteroides anabólicos para aumentar la masa muscular en los pollos es inútil".

"Para que tengan efecto, las aves tendrían que estar sometidas a un entrenamiento físico (como los atletas que utilizan estas sustancias). Los pollos no han volado en los últimos miles de años, lo que significa que la ausencia de ejercicio cancela cualquier beneficio de estas sustancias".

Pilar Castañeda Serrano, consejera del Instituto Nacional Avícola (INA) e investigadora de la UNAM, explicó que las hormonas no son necesarias en el pollo, "el tiempo que tarda la hormona en actuar superaría por mucho el periodo de crecimiento, por lo que los resultados no podrían ser visibles y el beneficio sería nulo".

Expuso que el incremento en el volumen de los pollos en tan poco tiempo (ocho semanas aproximadamente), se debe al mejoramiento genético que los especialistas han logrado en los animales a través de cruzas de las mejores aves.

Mencionó que el alimento de los pollos de engorda consiste raciones a base de sorgo, maíz o soya que incluye vitaminas, minerales, aminoácidos y antioxidantes. Además, aseguró que las hormonas no podrían agregarse a través del alimento debido a al tipo de digestión que poseen las aves.

Otros factores en contra para el uso de hormonas es que en México es ilegal el uso de hormonas en los alimentos en los animales. De igual forma el costo de la hormona elevaría considerablemente el precio del producto al consumidor final por lo que las pérdidas para los avicultores serían cuantiosas.

Jaime Crivelli, insistió en que las declaraciones de Decio de María afectan de manera importante a la industria productora de pollo en México, pues propicia un mensaje que genera desconfianza al consumidor, cuando en la realidad la producción del alimento se realiza con los estándares internacionales que garantizan su calidad y su seguridad para el consumo.