El alza en la carne impulsa el consumo de pollo

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El alza en la carne impulsa el consumo de pollo

04 November 2010

ARGENTINA - El precio del pollo subió un 21 por ciento en la última semana y seguirá en alza por el incremento en el valor del cajón que compran los comerciantes para venderlos al público, mientras que la carne vacuna arrancó noviembre con un aumento del 7,4 por ciento.

La incesante suba en los precios de las carnes rojas llevó a los consumidores a volcarse a la compra de pollo en los últimos meses, por lo que los precios de los productos avícolas registraron una aumento del 60 por ciento entre el 1 de agosto y la actualidad.

El primer día de agosto, las carnicerías y granjas de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires ofrecían el kilo de pollo a 7,50 pesos, pero ahora el kilo se ubicó en los 12 pesos en los mismos comercios, y alcanzaría los 12,80 en los próximos días. (US$ 1= 3.95 pesos argentinos).

Según coincidieron fuentes del sector comercializador mayorista y minorista, el cajón de pollo pasó de 140 pesos el 20 de octubre a 180 pesos este miércoles, por lo que aumentó un 28,57 por ciento en menos de 15 días.

Debido a esa suba, los comerciantes que colocan el producto en las góndolas y se lo venden directamente a los consumidores aumentaron el kilo en un 21 por ciento hasta el momento, al pasarlo de 9,90 pesos a 12 pesos, pero las subas seguirán.

Comerciantes porteños y bonaerenses consultados por Noticias Argentinas aseguraron que cada vez que se da una suba fuerte de una sola vez en el precio mayorista, ellos deben aplicar las subas al consumidor en "cuotas", por lo que en los próximos días seguirán ajustando hasta "dejar de perder".

Algunos supermercados ofrecen el kilo de pollo a 10 pesos, dado que poseen acuerdos comerciales con el sector avícola (que recibe fuertes subsidios estatales para la compra los alimentos de los animales) patrocinados por la secretaría de comercio Interior, que preside Guillermo Moreno.

Ni bien comenzaron a subir los valores del pollo, Moreno convocó al sector y acordó con ellos que comenzaran la venta de los menudos (a 1,70 pesos el medio kilo y a 3,30 el kilo) desde el 17 de agosto, pero el plan fracasó por la baja demanda de los consumidores, reportó Jornadaonline.

Con los aumentos registrados, se está dando un fenómeno que fue advertido de antemano por las asociaciones de defensa de los consumidores, quienes habían alertado que el impulso del consumo de pollo se iba a contagiar a ese producto del "inflacionismo" de la carne vacuna.

El valor de la hacienda en pie subió en octubre 12,4 por ciento y sumó 105 por ciento en los primeros diez meses del año, según lo determinó el índice novillo del Mercado de Liniers al cierre del mes pasado, que se ubicó en los 8.077 pesos el kilo vivo.

Esos incrementos se trasladaron con rapidez e incluso en niveles más elevados a las góndolas de las carnicerías, donde el asado pasó a 35 pesos durante esta semana después de haber ascendido gradualmente desde los 28 pesos durante octubre. A este ritmo, el tradicional asado de fin se semana fue convirtiéndose en los últimos tiempos en una lujosa costumbre, ya que una familia tipo tiene que desembolsar unos 120 pesos para completar una parrilla de carne y achuras, incluyendo vino, gaseosas y pan.

Según un relevamiento de Consumidores Libres, el asado registró en el año un aumento del 49 por ciento, con una gran disparidad de precios entre distintos establecimientos, a pesar de que el consumo del producto per cápita bajó un 20 por ciento en 2010. Sólo durante octubre, los precios de la carne aumentaron más del 21 por ciento promedio en las góndolas y empujaron los cortes populares hacia arriba, por lo que el asado pasó de 26,90 a 32 pesos el kilo. Pero, en este miércoles, carniceros porteños consultados por esta agencia señalaron que el asado ya alcanzó los 35 pesos, debido a un aumento del 7,4 por ciento en el costo del kilo de media res entre el viernes 29 de octubre y el lunes último.

La suba se viene dando debido a la escasez de ganado y la dificultad de los frigoríficos por conseguir cabezas con buen peso, por lo que los precios se ajustan a favor de los productores pero impactan directamente en los bolsillos de los consumidores.

Los carniceros porteños arrancaron octubre pagando 14 pesos el kilo de media res, que pasó a 17,40 pesos el 20 de octubre y ascendió a 18,70 pesos en la actualidad, con traslados directos en los valores al consumidor final.