Se vacunan un millón de gallinas contra laringo

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Se vacunan un millón de gallinas contra laringo

16 February 2011

BRASIL – Los avicultores en Guatapará, la sexta mayor zona productora de huevos del estado de São Paulo, iniciaron el lunes la vacunación obligatoria de 1 millón de gallinas ponedoras contra la laringotraqueitis infecciosa (LTI).

La laringotraqueitis infecciosa (LTI) es una enfermedad respiratoria que provoca una disminución en la producción de huevos y la muerte de aves.

En Guatapará, la Oficina de Defensa Agropecuaria del Estado confirmó la enfermedad en febrero del año pasado y cerca de 3 mil aves fueron sacrificadas.

Desde entonces, el Estado inició un proceso de contención de la enfermedad, incluyendo control sanitario de entrada y salida de personas y vehículos de las granjas, y la preparación para el inicio de la vacunación, reportó Jornal Floripa.

En diciembre del año pasado, una resolución del Ministerio de Agricultura también ha establecido normas para los productores de huevo de Guatapará, como la restricción del tránsito de aves.

El lunes, las primeras gallinas fueron vacunadas – con dos gotas de un líquido de color azul, una en cada ojo del ave.

La LTI es una enfermedad respiratoria contagiosa que se presenta principalmente en las gallinas ponedoras. No es transmisible al hombre y el huevo no disemina el virus.

Según el presidente de la Cooperativa Agrícola de Guatapará, Saito Choichi, se estima que la enfermedad ha causado una caída del 10 por ciento en la producción de huevos durante el último año.

De acuerdo con el IBGE (Instituto Brasileño de Geografía y Estadística), Guatapará es el sexto mayor productor de huevos en el estado, con cerca de 21 millones de docenas. El estado São Paulo es el estado más grande de producción de huevos del país, con 860,9 millones de docenas, o 26,9 por ciento del total nacional.

De acuerdo con el veterinario Buchal Fernando Gomes, el Coordinador de Protección Agrícola, la vacunación de 1 millón de ponedoras debe tomar alrededor de dos semanas.

Las pollonas de reemplazo también deben ser vacunadas por un período indefinido.

En Bastos, donde en 2002 la LTI fue detectada por primera vez en São Paulo, la vacunación se inició en 2004 y no se interrumpió, pero en 2005 el problema fue declarado controlado.