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Genética y alimentación
09 August 2011CUBA - En la Unidad Empresarial de Base "Álvaro Barba Machado", centro avícola enclavado en la zona de La Sierrita, municipio de Cumanayagua, Cienfuegos, se dedican a preservar la línea genética de las especies de gallinas B 4, E 1 y H 2.
El objeto social, indica su director Víctor Romero, consiste en mantener esas especies para que dichas razas permanezcan vivas, en caso de acaecer cualquier epidemia o fenómeno de la más diversa índole.
Pero, al mismo tiempo, cebarlas en pos de mejorar el consumo poblacional, reporta 5 de Septiembre.
"Nuestro trabajo consiste en mantener la viabilidad de estos exponentes a lo largo de un período de cerca de diez meses", afirma Luis Vázquez, técnico veterinario de la granja de 26 hectáreas de superficie y dividida en cuatro grandes naves.
Reciben los ejemplares, provenientes de la vecina provincia de Matanzas, a las 17-18 semanas.
Los mantienen y ceban hasta las 50-52 semanas. Luego estas gallinas son sacrificadas y comercializadas a través de dependencias del organismo rector en la Perla del Sur.
De manera que en la unidad avícola cumplen dos funciones: preservar la línea genética, para garantizar carne y los huevos depositados por las ponedoras.
Tras el proceso de engorde, las aves alcanzan un peso promedio de tres kilogramos, aunque algunos animales han frisado los cuatro.
Del equipo de redacción de ElSitioAvícola