El Dr. Gustavo Ferrari es médico veterinario, consultor de empresas de una vasta región de Argentina. Tras años de experiencia en avicultura, considera que la aplicación de la vacuna en el 100% de las aves, mejora la salud intestinal y resuelve las preocupaciones sobre residuos de anticoccidiales.

Noelma S.A., es una empresa avícola argentina, fundada en 1975 y pionera en vacunación contra la coccidiosis. Produce aproximadamente 2,5 millones de pollos de engorde al mes. Está ubicada estratégicamente en la frontera de la provincia argentina de Entre Ríos con la República Oriental del Uruguay. Tal localización facilita el embarque de sus productos a los países del Mercosur, la Unión Europea, Rusia y África.

La producción de esta empresa está compuesta por: granjas de reproductoras, planta de incubación, granjas de engorde –propias e integradas– y su propio frigorífico. Todo el proceso se rige por estrictas normas de bioseguridad y adecuado a las exigencias de las normas internacionales que exige cada mercado específico. El alimento balanceado que se utiliza se elabora en plantas propias de la empresa, donde de acuerdo a las necesidades estacionales o por costos, se optimizan los insumos.

“Hace años teníamos dudas sobre la vacunación de las reproductoras contra esta enfermedad, pero desde que tomamos la decisión de implementar el programa de vacunación en cada lote ingresado, obtenemos niveles excelentes de control de la coccidiosis y rendimiento de las aves. Actualmente vacunamos el 100% de las reproductoras en Noelma y ya no tenemos dudas”.

Noelma produce aproximadamente 2.5 millones de aves por mes.

OPERACIONES DE VACUNACIÓN

El uso de la vacunación contra la coccidiosis en el pollo de engorde comenzó aproximadamente hace 6 años. “En ese momento, los directores de la compañía decidieron comenzar a vacunar unas 300.000 aves, para evaluar resultados. Se utilizó la vacuna Coccivac-B. La positiva evaluación de la prueba hizo que se programara un plan de rotación entre anticoccidiales químicos e ionóforos. La vacuna se utilizó de octubre a mayo del año siguiente. La implementación de la vacunación marchó muy bien, aunque durante el segundo año, la productividad se redujo. Después de realizar una serie de investigaciones, llegué a la conclusión de que nuestros problemas de producción estaban relacionados con otros factores, ninguno de ellos relacionado con la vacuna. Posterior a esto, resolvimos vacunar el 30% de la totalidad de las aves mensuales que se destinaban al mercado exterior y, para el resto se utilizaron planes de anticoccidiales. Esta metodología se aplicó en los dos años posteriores a la experiencia relatada”.

“En junio de 2008 se inició un programa de un año, vacunando el 100% de las aves, con el objetivo particular de evaluar su comportamiento en los meses de invierno”, explicó el Dr. Ferrari.

EL ENFOQUE DE LA VACUNA ES "IDEAL"

El Dr. Ferrari considera a la vacunación como el enfoque “ideal” para el control de la coccidiosis ya sea que se utilice continuamente o en programas de rotación con anticoccidiales en el alimento. Esta última práctica restablece la eficacia de los coccidiostatos gracias a la resiembra de los galpones con ooquistes vacunales.

Hizo notar que la vacuna no es sólo un efectivo método de control de la enfermedad sino que además su costo no es mayor que el de un plan convencional de anticoccidiales. También la vacunación facilita el manejo general de la empresa, dado que se simplifica la operación de la planta de alimentos balanceados.

Para optimizar el resultado final del plan –dijo el médico veterinario– es importante cuidar por ejemplo la temperatura de conservación de la vacuna, “Implementé una serie de normas sobre las temperaturas de refrigeración, para evitar que se congele”, resaltó.

"Actualmente vacuna al 100% de sus aves contra la coccidiosis."
Dr. Ferrari

Con base en las recomendaciones de Intervet/Schering-Plough Animal Health, el Dr. Ferrari también puso en marcha medidas para mejorar la iluminación y la temperatura en la sala de despacho de los pollos que, junto al colorante rojo que se agrega a la vacuna, asegura que la misma se distribuya uniformemente.

Nuestro entrevistado agregó que en las aves vacunadas contra la coccidiosis, la nutrición reforzando vitaminas y minerales, el manejo en la crianza y la salud intestinal hasta los 21 días, son factores muy importantes. Este último aspecto, la salud intestinal es especialmente monitoreado por la empresa. Cuando es necesario realizar noelma el control bacteriano, se administra Enradin F80 en el alimento.

Al preguntarle sobre otras enfermedades del intestino en las parvadas de Noelma, el Dr. Ferrari dijo enfáticamente: “No he visto casos graves de enteritis necrótica en los últimos 10 años. No tenemos problemas con esta enfermedad. Ciertamente, en años recientes se ha presentado dermatitis gangrenosa en el área de la Provincia de Entre Ríos, pero nosotros no fuimos afectados”.

El médico concluyó diciendo que, con la vacunación contra la coccidiosis, “importantes aspectos de la producción resultan más fáciles y están mejor organizados. Podemos afirmar con nuestra experiencia que la aplicación de la vacuna es una ventajosa herramienta en la mejora de la salud intestinal, con el plus de ayudar a los anticoccidiales a funcionar nuevamente, casi como si fueran nuevos”.

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