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Cómo conservar la calidad del huevo en el verano
04 August 2010El estrés por calor en las gallinas ponedoras reduce el consumo de alimento y la calidad del huevo. Durante los cálidos meses de verano, es importante prestar atención al sistema de ventilación. Otras opciones para minimizar el estrés por calor son reformular el alimento, ajustar la sincronización de la alimentación y la iluminación y cuidar los niveles de calcio y fósforo en la dieta, escribe Bruce Webster, investigador avícola de extensión del Servicio de Extensión Cooperativa de la Universidad de Georgia en la edición de julio de 2002 de Poultry Tips.
Se sabe muy bien que una gallina debe consumir una cantidad adecuada de energía, proteína y calcio en un alimento balanceado para producir huevos de tamaño óptimo y de buena calidad de cascarón. También, se sabe muy bien que el calor excesivo durante el verano resulta en huevos más pequeños o con una baja calidad de cascarón.
Las altas temperaturas ambientales reducen el apetito de la gallina. Dentro de límites es posible reformular el alimento para proporcionar cantidades adecuadas de proteína y calcio a tasas reducidas de consumo de alimento. Sin embargo, si el ambiente de la caseta de gallinas está demasiado caliente, no va a ser posible ajustar lo suficiente la fórmula del alimento como para mantener el tamaño del huevo o la calidad de cascarón, en vista del bajo consumo de alimento.
Las gallinas
La reducción del apetito no solo es la única consecuencia del estrés por calor. Las gallinas jadean cuando tienen mucho calor. El jadeo evapora agua del sistema respiratorio y enfría el ave debido a que el calor se absorbe en la conversión de agua a vapor de agua. Sin embargo el jadeo de las aves que tienen calor también aumenta el flujo de aire a través de los pulmones.
Debido a que se lleva a cabo el intercambio de gases cuando el aire pasa a través de los pulmones, se elimina el dióxido de carbono de la sangre a una tasa mayor de la normal.
El dióxido de carbono es ácido en solución acuosa, por lo que su eliminación a una tasa mayor cambia el equilibrio ácido-base de la sangre a un pH mayor, de tal forma que hay menos iones de carbonato para formar carbonato de calcio, que es el principal componente del cascarón de huevo.
Por lo tanto, el jadeo excesivo contribuye a reducir la calidad del cascarón.
Control de temperatura
Obviamente, la clave para mantener el tamaño del huevo y la calidad del cascarón durante el calor del verano es hacer lo que sea posible para prevenir que las aves tengan demasiado calor.
Para una caseta de gallinas, esto significa la temperatura promedio de la caseta lo suficientemente bajo y minimizar la variación de la temperatura alrededor de ésta.
Las casetas que están ventiladas con ventiladores deben de ser herméticas para que todo el aire que entre pase a través de la entradas de aire, donde se pueden enfriar si es necesario mediante evaporación de agua.
Las casetas que tienen paredes laterales son más fáciles de hacerlas herméticas que las que tienen cortinas laterales. El aire que no se ha enfriado va a pasar a través de los agujeros de las paredes o de los espacios alrededor de las puertas, lo que crea puntos calientes.
Las filtraciones de aire también van a reducir la velocidad de éste en una caseta ventilada con túnel, lo que lleva a aumentos de temperatura excesiva entre la entrada y los ventiladores.
El aislamiento del techo y las paredes debe mantenerse en buenas condiciones para limitar la penetración del calor exterior. Esto generalmente significa que debe mantenerse un buen programa de control de roedores y plagas, porque los ratones y los escarabajos pueden destruir el aislamiento.
Los cojinetes de enfriamiento deben mantenerse limpios para promover un flujo libre de aire. El verano probablemente es la época más importante de mantener limpios los ventiladores y en buenas condiciones, porque es la estación que requiere la ventilación pico.
Es sorprendente cuánto flujo de aire se reduce con la acumulación de polvo en las aspas de los ventiladores y en las mallas. Cualquier deficiencia en el flujo de aire en esta época va a hacer que el interior de la caseta esté demasiado caliente.
Alimentación: calcio
Si se ha hecho todo para mejorar la temperatura de la caseta pero sigue siendo un problema la calidad del cascarón, podrían ser de utilidad algunos ajustes en el manejo de alimentación.
Las gallinas preferentemente consumen calcio al final del día durante los días de la formación del cascarón, si se les da la oportunidad de hacerlo. También se sabe que la presencia de calcio en el tubo digestivo durante el momento de formar el cascarón (generalmente en la tarde y noche) puede aumentar la calidad del cascarón.
De esta forma, parte de las fuentes de calcio del alimento deben ser en partículas lo suficientemente grandes para que las gallinas puedan distinguirlo y comerlo de manera preferente en los días que se forme el cascarón.
Los comederos deben hacerse funcionar periódicamente durante las cuatro horas antes de oscuridad para fomentar el consumo de calcio.
Además, se pueden encender las luces durante una hora o dos a media noche y hacer funcionar los comederos para fomentar que coman las gallinas durante las horas frescas del día, haciendo de esta forma que ingieran más calcio.
Si se observa un jadeo excesivo durante el día, la calidad del cascarón se puede mejorar sustituyendo una porción del cloruro de sodio en la dieta con bicarbonato de sodio, teniendo en cuenta que el requerimiento de cloruro de la gallina puede aún cubrirse con la ración general.
Esta estrategia va a hacer eficaz sólo si las gallinas comen el alimento mientras se forma el cascarón.
Alimentación: fósforo
Finalmente, es importante recordar la relación que tiene el fósforo con el metabolismo del calcio. El calcio de la dieta se almacena durante el día en el hueso medular y más tarde se libera para la formación del cascarón de huevo.
Debido a que la mayor parte del hueso consiste de fosfato de calcio, una deficiencia de fósforo en la dieta puede prevenir la acumulación del calcio de la dieta en el hueso medular, lo que llevaría más tarde a una deficiencia de calcio en la formación del cascarón del huevo.
Las preocupaciones ambientales sobre los niveles de fósforo en la gallinaza han llevado a intentos de reducir el contenido de fósforo en el alimento. Esto se ha hecho reduciendo la adición de fósforo disponible y añadiéndole enzima fitasa para hacer que el fósforo fítico que ya está en los componentes vegetales del alimento sea más disponible para el ave.
Algunos ingredientes de alimentos, como la harina de carne y hueso de diferentes fuentes, pueden variar ampliamente en contenido de fósforo.
También, el incremento en la disponibilidad de fósforo en los alimentos de ponedoras suplementados con fitasa puede variar del 30 al 60%.
En un alimento con fósforo reducido, estas variaciones pueden combinarse para hacer que el margen real de seguridad esté peligrosamente por debajo de lo esperado.
La reducción del consumo de alimento durante el estrés por calor puede inclinar a las aves hacia una deficiencia de fósforo, lo que resulta en problemas de calidad del cascarón y de otra índole. Sería muy bueno aumentar el margen de seguridad del fósforo en los alimentos para gallinas ponedoras durante épocas en que se anticipe el estrés por calor.
Agosto 2010
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