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Crianza para el bienestar animal
06 September 2013Investigadores holandeses están trabajando en programa de crianza que tienen como objetivo el bienestar animal, como por ejemplo que los pollos no se picoteen unos a otros hasta matarse, informa Nienke Beintema en el último número de Wageningen World.
Montones y montones de carne y huevos. Crecimiento rápido, inmunidad fuerte... es por características como esas por lo que se elige tradicionalmente a los animales en el sector ganadero. Y con resultados impresionantes. El rendimiento por animal ha crecido de manera espectacular durante el último siglo.
Pero esta producción óptima también tiene su lado malo: cuando hablamos de bienestar animal, deja mucho que desear. Los pollos se picotean hasta matarse entre ellos, los cerdos se mordisquean la cola unos a otros y vacas con una musculatura que dobla la normal pueden dar a luz solo por cesárea.
"Estas cosas cada vez están demandando más atención", dijo la Dra. Rita Hoving del Centro de Crianza Animal y Genómica en el Centro de Investigación Ganadera de Wanegingen UR. "La sociedad no quiere maltrato en el sector ganadero. Por lo tanto, estamos trabajando junto a la industria en programas de crianza que puedan mejorar el bienestar animal a través de la crianza de animales que no necesitarán tantos cuidados veterinarios".
* "La sociedad no quiere maltrato en el sector ganadero" |
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Rita Hoving
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Familias antisociales
La selección por características físicas es solo una entre las formas posibles para estimular el bienestar animal. Otra es la selección por comportamiento. El comportamiento social de los animales que se crían unos muy juntos a otros, como es el caso de cerdos y pollos, puede ser uno de los problemas de bienestar más difíciles.
"Las ponedoras a menudo se picotean entre ellas", afirma Piter Bijma, un colega de la Dra. Hoving.
"Algunas veces hasta matarse. Ahora la punta del pico se recorta al poco de eclosionar, de modo que se limita el daño. Si no se hace así, la tasa de mortalidad puede situarse en hasta el 40 por ciento en casos extremos. Y los cerdos se empujan y se muerden los unos a los otros. Esto es malo, no solo para su bienestar sino también para la productividad. Los animales estresados no crecen igual de bien".
De modo que los investigadores de Wageningen se preguntaron si se podrían criar animales más sociales. Así, se solucionarían estos problemas.
"La dificultad están en que la crianza en busca de un comportamiento es mucho más difícil que la crianza en busca de productividad. Es muy fácil cuantificar la cantidad de huevos o kilos de carne. Pero solo se puede cuantificar el comportamiento social a través de realizar miles de observaciones. Esto es demasiado laborioso":
Así que Bijma y sus colegas hacen esta investigación indirectamente. No examinan a los animales en sí sino a otros con los que comparten el mismo espacio. ¿Cuántos mueren o crecen menos? Esto es relativamente más fácil de rastrear en miles de animales y, por lo tanto, a nivel familiar también.
El Dr. Bijma declaró: "Si las aves en la familia X han muerto a una velocidad relativamente rápida, se sabe que se tiene una familia antisocial".
Al estudiar un árbol familiar como este, los investigadores Wageningen descubrieron que el comportamiento social tiene un componente genético fuerte. De forma interesante, no solo son los genes de los "picoteadores" los que contribuyen a esto sino también de aquellos que son sus víctimas: algunas familias lo sufren más a menudo que otras.
Los dos valores de reproducción que resultaron ser más importantes para la crianza sin picoteo fueron: la capacidad del animal para sobrevivir y su influencia en la supervivencia de sus compañeros.
"Estamos trabajando ahora en averiguar qué genes están involucrados"; dice el Dr. Bijma."Pero incluso sin la información genética, ya hemos llegado bastante lejos, al trabajar junto con una compañía de crianza avícola. Nuestra estimación es que podía reducirse la tasa de mortalidad entre el tres y el cuatro por ciento por generación al criar animales más sociales".
* "Si las aves en la familia X han muerto a una velocidad relativamente rápida, es una familia antisocial" |
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Piter Bijma
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Preferencia por el despique
En teoría, por lo tanto, las expectativas de este tipo de crianza son muy positivas. En la práctica, sin embargo, no es tan sencillo explotar todo su potencial.
"La crianza que tiene como objetivo el bienestar animal normalmente es perjudicial para la productividad", declara el Dr. Bijma. "Solamente porque entonces se tiene menos alcance para la selección para la producción. Parece, por ejemplo, que las aves más sociables empiezan a poner huevos unos días más tarde. A los avicultores eso no les gusta".
Hasta ahora, algunos de ellos prefieren la opción de despicar.
"Se espera que a largo plazo eso se prohíba", dice el Dr. Bijma. "Y entonces
al menos algunas empresas contarán con aves más sociales".
El argumento fundamental por parte del público es que "no es normal" y que "no es natural".
"Todo depende ahora de cómo de importante las empresas genéticas piensan que es", expresó el Dr. Ten Napel. Es optimista: "un grupo de criadores está trabajando en esto. Creo que funcionará".
La Dra. Hoving añade: "A parte de la pregunta sobre hasta qué punto se pueden seleccionar las características de bienestar, también se plantea la pregunta de cómo motivar a un grupo así de grande y diverso como son los ganaderos para que se comprometan a hacerlo".
Septiembre 2013
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