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Control de micoplasmosis en reproductoras e impacto en la producción de pollo: 1
31 January 2013El fracaso en erradicar micoplasmosis en los lotes de aves comerciales es, en gran parte, debido a la habilidad de estos organismos de generar infecciones en sus huéspedes que duran toda la vida y debido al diseño físico de la industria avícola moderna. (Primera parte de una serie de dos artículos).
Conferencia presentada por Dr. Gary D. Butcher, Universidad de Florida y Liliana Aida Monroy, Elanco Salud Animal, durante el durante el XXII Congreso Centroamericano y del Caribe de Avicultura, en Panamá, mayo de 2012.
Las infecciones por micoplasma han sido reportadas como una causa importante de pérdidas económicas para la industria avícola desde que comenzara su modernización y expansión en los años 1930. Varios planes han sido implementados a través de los años para ayudar a eliminar estas enfermedades, consistiendo muchas veces en programas de bioseguridad y el uso de vacunación y productos terapéuticos. Como un testimonio de la resistencia y adaptabilidad del micoplasma, éste continúa causando pérdidas considerables a la industria avícola.
En muchos países, el Mycoplasma gallisepticum (MG) y el M. synoviae (MS) son endémicos y causan pérdidas económicas para los criadores en masa de gallinas y pollos jóvenes. En estos países, las industrias avícolas han indudablemente fallado en erradicar estas enfermedades y, por lo tanto, intentan reducir las pérdidas mediante la vacunación, medicamentos y prácticas de manejo.
El fracaso en erradicar el MG y el MS en los lotes de aves comerciales es, en gran parte, debido a la habilidad de estos organismos de generar infecciones en sus huéspedes que duran toda la vida y debido al diseño físico de la industria avícola moderna.
Las granjas avícolas construidas en años recientes están diseñadas para ser económicas en los costos de construcción y desde un punto de vista laboral, pero raramente es la prevención de enfermedades una consideración principal.
Patógenos respiratorios primarios
La infección con Mycoplasma gallisepticum ha sido referida a través de los años como MG, micoplasmosis, enfermedad respiratoria crónica (ERC), infección por PPLO (organismos tipo pleuronuemonia) y aerosaculitis. El M. synoviae se ha denominado MS, sinovitis infecciosa y sinovitis.
Tanto el MG, como el MS pueden actuar como los patógenos respiratorios primarios en las aves. Estas enfermedades están caracterizadas por signos y lesiones respiratorias y un curso prolongado dentro del lote. El éxito de este organismo, que es muy lábil, para infectar lotes de gallinas y pollos alrededor del mundo indica que las prácticas de manejo avícola han facilitado la sobrevivencia y transmisión de este agente.
El Mycoplasma gallisepticum y el M. synoviae se transmiten en los huevos puestos por las gallinas reproductoras infectadas. La transmisión vertical no es muy eficiente, ya que la transmisión pico de los huevos de un lote infectado de gallinas reproductoras es menos del 3%. Si existieran factores agravantes tales como la supresión inmune, por ejemplo, puede haber mayor propagación del organismo.
Después que los pollitos nacen, los organismos del MG y el MS son transmitidos horizontalmente, pero solo por distancias cortas. La transmisión entre aves ocurre por la vía aérea y por la contaminación del agua y la comida dentro de un galpón. El lote completo puede infectarse aproximadamente en 3 semanas.
Los micoplasmas también infectan a otras especies de aves domésticas y salvajes, por lo que es importante asegurar que no haya contacto con las gallinas y pollos comerciales. Ya que los micoplasmas son muy frágiles, no se propagan eficientemente por las partículas en el aire. Por lo tanto, el MG y el MS no se propagan rápidamente por medio del aire, aún entre los galpones de la misma granja.
Es más común que los micoplasmas se propaguen en las granjas por la vía mecánica, la cual incluye propagación por medio de equipo, zapatos y otros fómites contaminados.
Las infecciones de micoplasmosis en las gallinas reproductoras se asocian principalmente con pérdidas en la producción de huevos. Los huevos fértiles tienen una menor probabilidad de maduración debido a la mortalidad tardía del embrión. Los pollitos tienen menos probabilidades de sobrevivir, ganar peso y obtener uniformidad.
Los pollos desarrollarán una enfermedad respiratoria asociada frecuentemente con complicaciones bacterianas. Sin embargo, si es exacerbada por complicaciones respiratorias tales como la enfermedad de Newcastle o debido a la vacuna para la bronquitis infecciosa o por un virus de campo, puede ocurrir una reacción respiratoria considerable con daño a las vías respiratorias. Esto permite la invasión de bacterias oportunistas como E. coli, resultando en una infección bacteriana secundaria.
Las cepas de micoplasmas varían considerablemente en su virulencia. Todas las cepas naturales del MG pueden producir pérdidas en la producción, incluyendo pérdida de peso corporal, aumento en la morbilidad y mortalidad, y pérdidas en la producción de huevos.
En gallinas altamente reproductoras, el problema principal asociado a las infecciones de MG y MS es la disminución desde un 5% hasta un 15% en la producción de huevos. El efecto en la cantidad y la calidad de la producción de huevos dependerá de la virulencia de la cepa del MG y del MS, el grado de estrés en las aves y el período de tiempo de la infección.
En la mayoría de los casos, la producción de huevos puede recobrarse pero permanecerá debajo de la curva estándar.
En un informe (Avian Diseases 25:406-415, 1984), las gallinas libres del MG pusieron 15.7 más huevos por gallina en el galpón que un lote no vacunado e infectado con el MG durante un período de 45 semanas de producción. En este estudio, las gallinas infectadas que fueron vacunadas con la cepa F o bacterina produjeron 7 huevos más por gallina en el galpón en comparación con los lotes infectados no vacunados.
Signos clínicos de MG y MS
Los signos clínicos asociados con las infecciones de MG y MS incluyen estertores traqueales, secreciones oculares y nasales, tos, disminución en el consumo de comida, pérdida de peso y disminución en la producción de huevos, la cual se mantiene a un nivel más bajo por el resto del ciclo.
El micoplasma será transmitido verticalmente durante la vida del lote e infectará a la descendencia. Las lesiones en las etapas iniciales consisten en una secreción espumosa en los sacos pulmonares. La secreción puede convertirse en una necrosis caseosa y de color amarillo. Si se complica, una peri-hepatitis fibrosa, pericarditis,peritonitis y aerosaculitis pueden desarrollarse.
Usualmente, la mortalidad en lotes de gallinas reproductoras es insignificante a diferencia de en los lotes de pollos jóvenes en donde la mortalidad para los casos complicados puede llegar a ser un 30% o mayor.
Diagnóstico de MG y MS
Un diagnóstico preliminar de las infecciones de MG y MS está basado en el historial, signos clínicos y lesiones. Pruebas serológicas, cada una con sus ventajas y desventajas, también han sido desarrolladas. Estas incluyen la prueba Sérica de Aglutinación en Placa (PSAP), la prueba ELISA y la prueba de Inhibición de la Hemaglutinación (IH).
Un diagnóstico definitivo requiere el aislamiento y la identificación del organismo. En años recientes, la prueba de Reacción en Cadena por la Polimerasa (PCR) también ha sido desarrollada y utilizada ampliamente.
Prueba Sérica de Aglutinación en Placa (PSAP)
La prueba Sérica de Aglutinación en Placa (PSAP) es considerada una prueba serológica que detecta la presencia de anticuerpos al MG y el MS. Los resultados positivos mejoran el diagnóstico, pero más pruebas son recomendables para su confirmación. La prueba puede detectar la presencia de una infección aproximadamente 5 días después de la infección en el campo.
Esta prueba puede ser realizada fácilmente y es rápida y económica. La prueba es muy sensible y tiene una tendencia a dar reacciones falso positivas.
Cuando una prueba PSAP es realizada y solamente existen unas cuantas muestras positivas, se sugiere diluir las muestras sospechosas y volver a realizar la prueba. También se sugiere realizar pruebas adicionales en las muestras sospechosas, pruebas tales como la IH o ELISA.
En años recientes, los resultados falso negativos de la prueba PSAP también han sido reconocidos. Estas reacciones falso negativas se han dado debido a la infección de las gallinas y pollos con organismos de MG y MS no virulentos y atípicos. Las cepas atípicas pueden estimular anticuerpos que difieren lo suficientemente en su antigenicidad de los antígenos de la prueba, lo que resulta en que la infección no sea detectada o se detecte pobremente.
En cualquiera de los casos, las infecciones no dan como resultado una reacción inmune detectable. La mutación de los organismos de MG y MS puede estar relacionada a la presión por el uso de antibióticos y vacunas a largo plazo.
Cuando se realizan pruebas serológicas, la interpretación de los resultados serológicos es más difícil, ya que los resultados no son definitivos. Muchas veces la prueba PSAP solo mostrará un porcentaje muy pequeño de reacciones. Cuando las pruebas son repetidas varias semanas después, de nuevo sólo se encontrará un porcentaje muy pequeño de reacciones.
La prueba ELISA resulta en títulos bajos, los cuales caen debajo de un rango sospechoso pero no permiten establecer un diagnóstico definitivo. La prueba IH, siendo la prueba que reconoce antígenos más específicos, muestra títulos de menos de 1:40 y, en muchos casos, los títulos no estarán presentes.
La prueba Elisa y la IH detectan principalmente la IgG en comparación con la prueba PSAP, la cual detecta la IgM. Por lo tanto, la prueba PSAP detectará la seroconversión más tempranamente que las pruebas ELISA e IH. La prueba PSAP no detecta anticuerpos en la yema de los huevos o anticuerpos maternos, ya que estos son predominantemente del tipo IgG.
La prueba IH muchas veces no es lo suficientemente sensible para detectar cepas variantes o no virulentas en las cepas del MG y el MS. Las pruebas IH y ELISA detectan anticuerpos aproximadamente 2 semanas después de que la gallina ha sido infectada. La prueba IH es muy específica, por lo tanto tiene una sensibilidad reducida.
Aunque es considerada la mejor prueba para confirmar un diagnóstico de una infección por MG y MS, la prueba IH toma mucho tiempo y es costosa en comparación a las otras pruebas disponibles.
La prueba PCR fue añadida recientemente al arsenal de pruebas disponibles y ha mostrado potencial para ayudar a identificar las infecciones por MG y MS en aves comerciales. Con esta prueba, un segmento del ADN del MG o el MS de la gallina sospechosa es rápidamente replicado produciendo grandes cantidades de ADN detectable.
La muestra más simple de recolectar es un hisopado de la mucosa traqueal. Tomar una muestra de los huevos entubados también es un sitio confiable.
Los hisopados deben ser colocados en un medio de transporte, enfriados y enviados por correo rápido a un laboratorio para que la prueba sea realizada en menos de 5 días.
La técnica de PCR basada en la amplificación aleatoria del ADN polimórfico da una huella digital única de la cepa y permite la diferenciación entre las cepas de la vacuna y las de campo. Las ventajas de la prueba PCR incluyen:
- prueba rápida con resultados en 24 a 36 horas,
- específica,
- sensible,
- los micoplasmas pueden ser detectados en muestras contaminadas con bacterias, y
- la infección puede ser detectada desde el primer día ya que la presencia del organismo es examinada en lugar de la respuesta inmunológica generada como resultado de la infección.
El objetivo principal para cualquier granja de gallinas y pollos es prevenir la introducción del MG y el MS en un lote limpio por medio del uso de un programa completo de bioseguridad. Una vez la granja se infecta, sin embargo, el método preferido de eliminar la infección es la despoblación de los lotes infectados. En muchos casos, la despoblación completa es necesaria para erradicar la infección en granjas con gallinas y pollos de diferentes edades.
Los organismos del MG y el MS son muy frágiles y pueden vivir sólo un corto período de tiempo en el ambiente afuera de la gallina. Por lo tanto, la despoblación completa de una granja es una manera relativamente simple de eliminar la infección en las instalaciones. Una limpieza y desinfección completa de la granja y más de 3 días sin ninguna gallina o pollo en las instalaciones resulta efectivo para eliminar el agente de la enfermedad.
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Vea la segunda parte de esta serie al hacer clic aquí.
Enero 2013