Artículos
El bienestar de las gallinas afecta al sector y al consumidor
08 May 2012La nueva normativa europea que prohíbe el uso de jaulas convencionales ha presentado un desafío para el sector del huevo en España, incluso en cuanto al precio del huevo, lo que repercute directamente en el consumidor. La Asociación Española de Productores de Huevos discutió las nuevas realidades de la industria con Nuria Martínez Herráez, asistente de redacción de ElSitioAvicola.
Desde que la DIRECTIVA 1999/74/CE del Consejo de 19 de julio de 1999, por la que se establecen las normas mínimas de protección de las gallinas ponedoras entrara en vigor el pasado 1 de enero de 2012, mucho se ha hablado sobre los efectos que tiene para los avicultores y los consumidores.
Por ello, desde ElSitioAvicola, se realizaron unas preguntas a la Asociación Española de Productores de Huevos (ASEPRHU) acerca lo que está ocurriendo en el sector.
María del Mar Fernández Poza, directora de la Asociación, respondió a las siguientes preguntas:
- ¿Qué porcentaje de productores de huevos aún no se ha podido adaptar a la nueva Directiva de la UE sobre el bienestar de las gallinas ponedoras, que entró en vigor el pasado 1 de enero de 2012?
M.M.F.P.: “En España están acabándose los trabajos de adaptación de las granjas de ponedoras en jaula. Hay algunos avicultores que no podrán adaptarse y cesarán su actividad. Podrían llegar a ser hasta un 30% de granjas, generalmente de pequeño tamaño”.
- ¿Qué pasará en el caso de los productores que no se han adaptado? ¿Qué pasa con los avicultores que han decido destinar su producción únicamente al procesamiento?
M.M.F.P.: “Solo se puede enviar a industria la producción de granjas que tengan un plan de adaptación que permita eliminar las jaulas convencionales en el plazo establecido por la Comisión; julio de 2012. Quienes no hayan presentado ese plan y no tengan las obras para la adaptación iniciadas no pueden seguir produciendo ni siquiera estos meses de 2012, y por lo tanto han tenido que sacar las gallinas y cerrar”.
- El aumento de precio que han venido sufriendo los huevos durante los últimos meses, ¿viene motivado además por otros factores distintos de la entrada en vigor de la Directiva como, por ejemplo, los altos precios de piensos o de las materias primas utilizadas para producirlos?
M.M.F.P.: “Los altos costes de los cereales no han supuesto incremento de los precios en los años pasados, ya que había excedente de producción. La razón para que el precio del huevo haya subido en los primeros meses de 2012 es el ajuste en los censos de ponedoras que se ha producido en muchos países de la UE al mismo tiempo, al aplicar la Directiva, que ha originado un descenso de la oferta".
- Este aumento en el precio, ¿cómo ha afectado la rentabilidad de los productores?
M.M.F.P.: “Los avicultores no pueden hacer las cuentas con los datos de uno o dos meses. Ahora hay precios altos, pero han estado muchos meses antes con pérdidas, y se supone que el medio plazo (dos-tres años) es el período para hacer balance y saber cómo ha resultado la rentabilidad media”.
- Hace unas semanas, INOVO (Asociación Española de Industrias de Ovoproductos) emitió un comunicado de prensa que hablaba de la escasez de huevos que se está dando en Europa y que podría afectar al normal funcionamiento de las industrias alimentarias que utilizan huevos en la producción.
¿Cuál es la situación en España? ¿Se está cubriendo la demanda nacional o se ha tenido que importar el producto desde otros países para que la industria alimentaria no se vea afectada? ¿Se espera que el precio de los huevos siga al alza durante los próximos meses?
M.M.F.P: “En estos momentos hay muy poca oferta de huevo en España y dificultades para abastecer tanto el mercado de huevo de mesa como el de industria. Esta situación podría alargarse al menos durante este año, a la vista de las previsiones de producción realizadas por la Comisión Europea. No conocemos los datos de importaciones de huevos en España, sí se han publicado los de la UE de enero y febrero y son muy significativos: un 51% más de importaciones en 2012 que en los mismos meses de 2011”.
- ¿Qué opina la industria española del huevo sobre que se permita, a nivel europeo, la importación de huevos de países como EEUU, Turquía o México, sin que se les exija que estén producidos según la nueva normativa sobre el bienestar de las gallinas ponedoras que si se impone a los productores europeos?
M.M.F.P.: “Los productores piden que se aplique la reciprocidad en las condiciones de producción de los huevos y ovoproductos importados. No es aceptable imponer normas unilaterales, que suponen incrementos de coste y pérdida de competitividad a los productores europeos y al mismo tiempo permitir la importación de huevos que en la UE se consideran ilegales. Es una discriminación que no puede entender nadie, ni el productor, ni el consumidor”.
“El fin de este camino es la pérdida de gallinas, de granjas y de empresas europeas, porque los huevos serán importados. Tendremos menos “gallinas con bienestar” en Europa, justo lo contrario de lo que pretende la norma”, concluyó María del Mar Fernández Poza.
Normativa crea descontento
Por otro lado, el secretario general de ASAJA (Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores) de Castilla y León, José Antonio Turrado, se pronunciaba también al respecto a principios del mes de abril a través de un artículo de opinión en la página web de ASAJA.
“La rigurosa normativa en materia de bienestar animal que impone la Unión Europea, que obliga a tratar a los animales mucho mejor de como se trata a las personas en la mayor parte del mundo, ha obligado a los granjeros a sacrificar ponedoras para que el resto ganen en espacio en las jaulas, y a menos ponedoras, menos huevos, a menos huevos y con la misma demanda, la subida de precios es la consecuencia más lógica”.
Además, advertía de que esto era la antesala de lo que ocurriría el año que viene con la entrada en vigor de la normativa para granjas reproductoras de porcino.
En resumidas cuentas, se podría decir que la normativa sobre bienestar animal ha creado más descontento que alegrías entre el sector avícola y agrícola español dado que las exigencias de Europa en materia de bienestar contradicen los intereses del sector y, al final, los de los consumidores que han visto (y pagado) un aumento del precio de los huevos durante los últimos meses.
Mayo 2012