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Actualización de la incubación
03 May 2012En un simposio especial celebrado junto con la Exposición Internacional Avícola (IPE) en Atlanta, Georgia, EUA se presentaron los últimos conocimientos sobre gestión y condiciones de incubación, informa Jackie Linden, redactora principal de ThePoultrySite.
En la Clínica de Reproductoras e Incubación, celebrada conjuntamente con IPE en Atlanta en enero de 2012, dos panelistas presentaron actualizaciones sobre las condiciones necesarias del desarrollo embrionario, y cómo gestionar las incubadoras para proveer esas óptimas condiciones.
Requisitos para el desarrollo embrionario
Según el Dr. Mike Wineland de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, las condiciones de incubación más importantes son temperatura, ventilación, humedad y el volteo de los huevos. Esto es vital ya que afectan la eclosión y el desarrollo posterior de los pollitos, incluido el metabolismo energético, actividad de la tiroides, maduración intestinal, funcionamiento cardiaco y crecimiento de tendones y huesos, entre otros.
“Las malas posiciones y anormalidades son indicadores de una mala gestión”, comentó, “porque afectan la utilización de nutrientes. Los parámetros de incubación afectan componentes extraembrionarios, que ayudan al embrión a utilizar los nutrientes en el huevo”. Aquellos componentes incluyen la vesícula vitelina, el amnios, el alantoides y el corion, explicó.
La ventilación es vital para el desarrollo del embrión. Lo bien que se mueva el aire dentro y a través del equipo, depende de las máquinas y de la conductividad de la cáscara del huevo.
La respiración embrionaria temprana ocurre en la capa de glóbulos blancos, donde los vasos sanguíneos se desarrollan a partir del día 2, dijo el Dr. Wineland. Más tarde, la membrana del corioalantoide ocupa el lugar de órgano principal de respiración para el embrión, ya que los vasos sanguíneos en esta región están vinculados a los poros de la cáscara del huevo. Estos poros son los responsables de la variación en la pérdida de humedad de un sola parvada.
El Dr. Wineland explicó que el consumo de oxígeno del embrión aumenta bruscamente a partir del día 8 de desarrollo hasta el día 16, a esto le sigue un período conocido como ‘etapa estable’, después de la cual el embrión picotea hacia la celda de aire, dentro del huevo.
El embrión entra en la etapa estable, pero continúa creciendo y sus órganos funcionan con oxígeno limitado, porque ha alcanzado la máxima conducción de aire a través de los poros. En este momento, el embrión redirige el oxígeno hacia el corazón y cerebro y fuera del desarrollo muscular. Este re-direccionamiento tiene un impacto importante en el desarrollo de la maduración tardía de órganos y tejidos.
Volteo del huevo
El volteo del huevo es importante para completar la formación de las membranas de la vesícula vitelina y de los vasos sanguíneos, así como para suministrar nutrientes a los órganos extraembrionarios y para eliminar el calor metabólico, continuó el Dr. Wineland.
En sistemas de incubación de etapa múltiple, el volteo de huevos ayuda a transferir el calor de los embriones mayores a los más jóvenes. Esto requiere un flujo de aire consistente dentro de toda la máquina.
Además, se sabe que el volteo del huevo afecta la formación de líquido subembrionario. El agua del albumen se mueve hacia la yema, ocasionando la división en fases lipídicas y acuosas, un proceso esencial para el desarrollo embrionario y que afecta la eclosión, especialmente por medio de la mortalidad embrionaria temprana.
El Dr. Wineland demostró que el volteo del huevo es esencial durante los primeros 12 días de incubación, y particularmente para la primera semana.
El ángulo de giro es importante para prevenir la estratificación en la yema, aunque sus investigaciones no revelaron diferencias en el rendimiento posterior de los pollos de engorde si el ángulo fue de 35°, 40° ó 45°.
La humedad relativa (o presión de vapor) regula la pérdida de agua del embrión. Hasta el día 17 ó 18 el embrión está bañado en líquido amniótico y fluido alantoideo, que actúan como depósito para mantener el contenido corporal de agua correcto. La pérdida de humedad del huevo es mayor en incubadoras de etapa múltiple que en incubadoras de una sola etapa, y no es uniforme a lo largo del periodo de incubación, sostuvo el Dr. Wineland.
La temperatura de incubación es importante porque afecta el momento de la eclosión, dijo. Utilizando el ejemplo de embriones de pavos, demostró cómo las temperaturas bajas a principio de la incubación pueden resultar en la incubación de embriones más chicos, porque los órganos no desarrollan correctamente. Luego durante la incubación la temperatura afecta principalmente la utilización de los nutrientes y la maduración de los órganos.
Las temperaturas excesivas bajan la tasa de desarrollo. El Dr. Wineland mostró con trabajos propios y de otros investigadores que se produce menor crecimiento de vellosidad en el yeyuno embrionario y en el desarrollo de la fibra muscular. Este último punto es importante para el crecimiento posterior del ave, ya que todas las fibras musculares están presentes en la eclosión.
Finalmente el Dr. Wineland demostró cómo el metabolismo de la tiroides se ve afectado por la temperatura de incubación. Esto repercute en la salud de las piernas y por lo tanto en sacar los pollos de engorde al mercado, ya que la glándula tiroides afecta tanto la simetría de los huesos así como el crecimiento de los tendones.
Necesidades de incubación de las razas modernas
Las razas avícolas actuales han traído cambios en la gestión de la incubación, según Scott Martin, especialista en incubación del equipo de soporte técnico internacional de Cobb, quien dio el ejemplo de la tendencia hacia la incubación de etapa única “porque hemos alcanzado el máximo en lo que podemos hacer con la incubación de etapas múltiples”.
Las mejoras en conversión de alimentos y peso corporal a los 49 días en los pollos parrilleros modernos, han conducido a los europeos a aplicar el cambio hacia la incubación de etapa única, pero Martin sostuvo que los resultados pueden ser igual de buenos que los de un sistema de incubación de etapas múltiples. Los factores importantes son el adecuado almacenaje del huevo, la administración de la reducida disponibilidad de mano de obra y la oportuna solución de problemas.
En cuanto a tiempo de retención, los huevos fértiles se almacenan generalmente de uno a cuatro días en la granja, seguidos por cinco o incluso hasta diez días antes de ingresar a la incubadora. Deben evitarse las fluctuaciones de temperatura durante estos períodos, sostuvo el Sr. Martin. Sugirió utilizar grabadoras de datos para los huevos en las bandejas, para monitorear las temperaturas y destacar cualquier área con problemas. Son especialmente útiles para mostrar las tendencias, indicó.
Hoy las plantas de incubación logran altos rendimientos, por ejemplo en los EUA tienen un promedio de 85 por ciento. Esto se ha logrado no solo a través de avances en genética, alimentación, etc., sino incrementando también el conocimiento de los efectos de la temperatura en los huevos fértiles. El factor crucial que ha surgido de la investigación y la experiencia es la necesidad de mantener una temperatura constante en cada etapa, evitando fluctuaciones.
Parámetros de incubación
Martin luego hizo recomendaciones hacia los parámetros que se deben medir para mantener y mejorar aún más los resultados de incubación. Debido a que es una medida de eficiencia, sugiere que la medida clave es el porcentaje de eclosión de huevos fértiles.
El progreso de la eclosión requiere asegurar la calidad y los procedimientos operativos estándar para alcanzar sus respectivas cifras. Estas son vitales para el rendimiento tanto de eclosión, así como para el rendimiento de los pollos de engorde, manifestó.
Puede ser difícil conseguir la financiación para la inversión, pero por ejemplo con los últimos sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado, cuando la eclosión llega al 88 por ciento, dicha inversión retornará pronto en términos de un mejor rendimiento de los pollos de engorde, sugirió.
Los equipos de ventilación necesitan mantenimiento regular y adecuado, subrayó Martin, mostrando ejemplos de mantenimiento deficiente en plantas de incubación donde los daños y/o los escombros impiden que el equipo funcione correctamente. Se deben limpiar siempre las trampas de condensación y las paredes entre cada lote, dijo, y los filtros se deben limpiar y ponerles fecha para poderlos cambiar con regularidad.
Todos los equipos de monitoreo en la planta incubación necesitan calibrarse tan frecuentemente como sea necesario. Esto no se efectuará por ejemplo cada trimestre, si cada vez que se hace se encuentra desfasado; la nueva calibración debe llevarse a cabo con mayor frecuencia hasta que casi no sea necesario ningún ajuste. Los controles modernos de las salas son ahora eficaces, sostuvo Martin, pero aún se necesitan revisar.
Los controles básicos recomendados por el Sr. Martin para supervisar la configuración son:
- Temperatura de embriones utilizando diferentes métodos
- Pérdida de humedad de los huevos, por ejemplo, midiendo la celda de aire
- El picoteo
- Temperatura del pollito cuando ha salido del cascarón
Todos estos controles están encaminados a confirmar lo que se piensa que se tiene, dijo.
Comprobar los residuos al abrir los huevos ayudará a buscar los patrones de posibles problemas durante los primeros días (días 1 a 7), los del medio (días 8 a 14) o los finales (día 15 en adelante) de las etapas de incubación.
El ovoscopiado es importante para evaluar la fertilidad (si se hace en los días 10 a 12) y el residuo a la eclosión. El Sr. Martin sugirió mantener estos controles lo más sencillo posible: la fertilidad en general, la incubabilidad y la eclosión de huevos fértiles, considerando también la edad de la parvada reproductora en ese momento.
La calidad del pollito se debe evaluar el primer día y durante la primera semana de vida, ya que lo más probable es que los pollitos buenos responderán bien posteriormente.
Cuando se vincula la evaluación de la calidad del pollito con la de la planta incubadora, se forma un panorama general del proceso.
La temperatura del pollito es la mejor herramienta para una prudente gestión y administración, dijo Martin. Concluyó diciendo: “Tenemos que volver a lo básico y corregir lo que tenemos” para lograr los mejores resultados posibles de incubación.
Mayo 2012
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