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El control de laringotraqueitis
31 March 2011El Dr. Guillermo Zavala de la Universidad de Georgia examinó el uso de vacunas vectorizadas recombinantes para controlar la laringotraqueitis infecciosa (LTI) durante la Clínica de Reproductoras e Incubación 2011 escribe Chris Wright, Editor de El Sitio Avícola.
Durante invierno y primavera es cuando ocurren la mayoría de los brotes infecciosos de laringotraqueitis. En reproductores y ponedoras por lo general es leve, pero en pollos de engorde es grave. Y ahora es un problema constante. La LTI se ha convertido en una situación crónica en el campo, observó el Dr. Zavala.
El Dr. Zavala hizo sus comentarios como parte de la Clínica de Reproductoras e Incubación 2011, llevada a cabo en Atlanta, EUA a fines de enero.
En pollos de engorde se detecta por lo general a los 42 días de edad, justo cuando están listos para salir al mercado. La enfermedad comienza en los ojos y luego se va al tracto respiratorio superior.
Puntos clave de la laringotraqueitis infecciosa:
- El herpesvirus es el patógeno principal. El virus permanece en el individuo durante el resto de su vida.
- En los portadores de por vida: recrudecimiento y propagación de los virus de campo y de la vacuna.
- Amplia distribución geográfica.
- La transmisión es por el aire y mecánica.
- Es fuerte cuando conviven pollos de engorde, reproductores y ponedoras (los pollos de engorde son el mayor problema).
- Las aves de traspatio pueden ser portadoras (aunque eso no es una preocupación principal).
Bioseguridad
La bioseguridad es verdaderamente fundamental para el control de la LTI, sostuvo el Dr. Zavala. Esto incluye el movimiento de personal, vehículos y equipos. Sin embargo la bioseguridad durante la vida del ave a menudo se pasa por alto, pero es sumamente crítica, ya que esto sucede por lo general en el día 42, edad en que la LTI se detecta por primera vez. Esa es la edad cuando se envían los pollos al mercado, entonces la contaminación se disemina desde las granjas y por todo el camino hasta la planta de procesamiento. Esta es una de las principales formas de propagación del virus.
Desde la perspectiva de bioseguridad, se suele ignorar el transporte de basura, pero también es una forma fácil de propagación del virus de la LTI.
La respuesta de la industria avícola a la LTI ha de ser una de colaboración y cooperación, a fin de controlar realmente la enfermedad.
Vacunación
* "No existe una vacuna perfecta contra la LTI" |
El Dr. Zavala dijo que es muy importante definir los objetivos de la vacunación. ¿El propósito es controlar los brotes de LTI, o más bien evitarlos? ¿Es reducir los signos clínicos, o la mortalidad? ¿O es que el resultado que se desea es una combinación de todo lo mencionado anteriormente?
Como regla general se utiliza una vacuna recombinante en la incubadora, y una vacuna viva atenuada en el campo. Se puede utilizar vacunación masiva (agua, aerosol, in ovo), o vacunas individuales (gotas en los ojos, gotas nasales, cepillado de la cloaca, subcutánea, intramuscular).
Las vacunas atenuadas son bien sea de origen de embrión de pollo (CEO por sus siglas en inglés), que se utiliza comúnmente en ponedoras; o de origen de cultivo de tejido (TCO por sus siglas en inglés), que se usa en pollos de engorde.
Las vacunas recombinantes fueron diseñadas originalmente para inyectar. Ellas tienen una respuesta inmune lenta. Como objetivo utilizan células atípicas, tales como viruela o herpesvirus de pavo. En aves jóvenes proporcionan una protección aceptable. En aves mayores tienen una duración desconocida.
No existe una vacuna perfecta contra la LTI, destacó el Dr. Zavala.
Las ventajas de las vacunas recombinantes es que no afectan el rendimiento de las aves, no causan reacción, y no hay posibilidad de reversión a la virulencia.
Las desventajas incluyen: mucho mayor costo que las vacunas CEO, la protección es menor, la protección tiene un inicio lento, existe una importante propagación del virus, la duración de la inmunidad es desconocida y las vacunas contra la viruela / LT pueden causar neumonía.
El Dr. Zavala mencionó específicamente que para pollos de engorde pesados (asadores) que crecen hasta los 56 días, es mejor la vacuna CEO. Para las aves más ligeras que crecen en 42 días de edad, una vacuna recombinante es mejor. Los brotes se producen entre los 35 y los 42 días, alcanzando un pico alto a los 42 días, aunque la propagación se detiene mucho más tarde.
Para la vacuna CEO, no debe vacunarse después de los 14 días de edad o habrá demasiada propagación.
Conclusión
Resumiendo su evaluación de vacunas recombinantes, el Dr. Zavala dijo que las vacunas de vectores no provocan problemas de rendimiento. Se trata de una alternativa adecuada para el control de la LTI. Son una herramienta adecuada para la eventual erradicación de la LTI.
Sin embargo, las vacunas recombinantes no proporcionan suficiente protección en las zonas donde ocurre un brote severo. Además, permiten la circulación del virus y la propagación.
Marzo 2011